Capítulo 265. Especuladores. Ahí están, forrándose a nuestra costa. Ahí están destrozando vidas y arruinando felicidades. Ahí están, con el consentimiento de gobernantes y la pasividad de quienes, estupefactos, seguimos las noticias con más indignación que entendimiento. Ahí están, hasta que se nos ponga en las narices largarlos.

Al Banco Central Europeo, al Fondo Monetario Internacional,
a todos los especuladores que se ríen, a mandíbula batiente, mientras nosotros lloramos.

¡Ja! -Dijeron-

Y no supimos qué querían decir.