Capítulo 342. San jorge matando al dragón. No, no es San Jorge, que ostenta el mismo rango que Rajoy en el infierno de los diablos. Pero me seduce tanto la idea de la guerra fratricida: los de derechas cargándose a los de derechas. Los "liberales" atacando a sus congéneres. Bonito espectáculo el que nos están ofreciendo.

Anda, que como le digan que sí,
qué susto se va a llevar

En España tenemos una de esas democracias de opereta (o de pandereta). Esas que se proclaman a los cuatro vientos y se quedan en ná cuando los demás pretenden algo que no nos gusta. Entonces su palabra no cuenta, no nos sirve, no nos vale.
Cuando un pueblo tiene que acudir permanentemente al pasado (al que llama Constitución) en lugar de hacerlo al presente (a lo que piden los ciudadanos de hoy), entonces merece la pena que la democracia sea revisada, que sea sometida a meticulosos análisis de sangre, orina y cuantos flujos se crea conveniente, porque adolece de la enfermedad de la imposición y la tiranía.

En Cataluña tienen unos de esos gobernantes que juegan con el pueblo, con sus ilusiones, con sus demandas. Y parece que no quieren darse cuenta.

Rajoy y Mas son primos hermanos. En realidad más hermanos que primos. En este culebrón estamos comprobando que los primos somos nosotros, los de siempre.