Artículo y chiste para http://salamancartvaldia.es |
No hago más que darle vueltas a
la cabeza. Me imagino al prófugo Puigdemont, allá por el extranjero, con sus
derechos reducidos sin haber sido juzgado ni condenado.
Veo al delincuente Urdangarín, allá
por el extranjero, con su vida normalizada tras haber sido juzgado y condenado.
Le veo viajando de aquí para allá, disfrutando del dinero de todos los
españoles…
Me hago mil preguntas y obtengo
mil respuestas. Es que el uno nunca fue votado y al otro le respaldan las
urnas. Es que el uno es consagrado desigual por la Constitución, y el otro es
declarado desigual por el gobierno.
No lo puedo evitar. Cada vez me
da más risa este sistema nuestro, y esta patria nuestra, y esta manera de ser
de los españoles, inquisidores de urnas y amparadores de corruptos y
delincuentes.
España, país de contrastes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario