|
Octava entrega para la sección de opinión "La casa invita", en salamancartv.com |
Razonamientos
encadenados.
Mariano dice que la recuperación económica de España está a
la vuelta de la esquina.
La esquina es España, sede de faldas cortas y bolsos al
viento en busca de clientes.
Los clientes, dice Cristóbal, no pagan impuestos y eluden
sus obligaciones fiscales.
Los fiscales están al servicio de los partidos y hace tiempo
que dejaron de amparar al ciudadano.
El ciudadano juega a ser el lerdo que coloca en el poder a
los que anuncian la recuperación económica a la vuelta de la esquina.
La esquina, en la España de la sinrazón, es redonda.
Redonda les salió la jugada de afirmar que no recortarían
las pensiones, ni los gastos de sanidad o educación.
La educación se encuentra perdida entre promesas electorales
con las que se ríen de nosotros.
Nosotros no somos nadie.
Nadie se atreve a decir que nos están robando la dignidad,
el respeto, la palabra.
La palabra que dieron está tan vacía como faltas de higiene
se muestran las cloacas.
Cloacas son las bocas de los que mienten.
Mienten. Mienten. Mienten.
Mienten aquellos a quienes les concedemos la potestad de
recortar la verdad, de ajustar la razón y de rescatar la necedad.
La necedad es lo que permite que haya un Mariano a la vuelta
de cada esquina.
La esquina es esquirla que se clava en el corazón de cada
español que no tiene derecho al subsidio ni a la esperanza.
La esperanza… La esperanza ya casi no existe: la han
secuestrado y nos piden como rescate el silencio o la multa por hablar, por
opinar, por manifestar nuestro parecer.
Parecer, lo que se dice parecer, esta España nuestra parece
una casa de esquinas.
Esquinas de falda corta. Esquinas redondas. Esquinas de
esquirla.