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Artículo y chiste publicados en http://salamancartvaldia.es/ |
Inauguraciones
Creo que Emilio, el camarero, va a votar a Ciudadanos. Se
está cansando de sentirse tonto, traicionado. El desencadenante, la fiebre que
le ha entrado a don Mariano de inaugurarlo todo, incluso lo que lleva más de
medio año funcionando.
Emilio critica amargamente al que fuera su líder. Le
reprocha que en otro tiempo no diera la cara (recuerda que incluso compareció
ante la prensa a través de una pantalla de televisión) y que ahora ni pierda
baza para salir en los medio.
“Nos tratan como a
tontos”, dice. Y no le falta razón. Para Emilio somos tontos por consentir
que nos manipule con medios de publicidad más o menos eficaces. Para mí lo
somos por haberle dejado hundirnos, por haber arruinado a millones de familias,
por favorecer a los suyos a costa de todos los demás.
Emilio anda acercándose al partido naranja. Nosotros nos
reímos y le advertimos que la jugada puede salirle rana.
“No, si es lo que
pienso. A veces me digo a mí mismo que más vale lo malo conocido…” Pero
luego ve a don Mariano en la tele y le entran ganas de conocer lo bueno. Aunque
pueda ser peor que lo malo.
Seguro que don Mariano se mantiene ajeno a estos pensamientos.
Ha salido del caparazón de su tortuga y reaccionará como tal, como tortuga:
lento, lento.
No le auguro buen futuro así. Y me alegro. Me alegro tanto,
que invito a una ronda.