El problema, me da por pensar, es que esos temas de Estado son los que han hecho que los ciudadanos hayamos estado empobreciéndonos paulatinamente; son los que hacen que el mundo laboral haya estado avanzando hacia la temporalidad y la precariedad; son los responsables de que la sociedad haya estado abriendo brechas entre ricos y pobres.
¡Ay, que me da a mí que más que Estado hablamos de empresa, de banca, de capital y de ricos! Muy ricos.
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